Países Bajos tiene como objetivo invertir hasta 338 millones de euros (401 millones de dólares) en proyectos de hidrógeno verde como parte de su impulso para cumplir con los objetivos climáticos. Así lo comunicó el viernes pasado el gobierno holandés, que también informó de que el dinero procede de un fondo de 20.000 millones de euros anunciados el año pasado para fortalecer la economía nacional. El objetivo es estimular la producción de hidrógeno verde y encontrar formas de utilizarlo como combustible en la industria.
El hidrógeno renovable se extrae del agua a través de la electrólisis alimentada por energía renovable, un proceso que no libera emisiones de carbono ni en su producción ni en su consumo.
Apuesta europea por el hidrógeno verde
La Unión Europea ha hecho del hidrógeno una parte clave de su hoja de ruta para eliminar las emisiones de gases de efecto invernadero para 2050, con planes de instalar 40 gigavatios de electrolizadores productores de hidrógeno esta década.
Sin embargo, el desarrollo del hidrógeno verde está en una fase muy temprana, y los costes de hacerlo siguen siendo demasiado altos para competir con los combustibles fósiles sin subsidios gubernamentales.
Varios ambiciosos proyectos de hidrógeno renovable, incluidos los grandes electrolizadores, se han anunciado en los Países Bajos en los últimos años, pero todos siguen esperando una decisión final de inversión.
Hogar de muchas grandes industrias y el principal puerto marítimo de Europa, los Países Bajos se encuentran entre los países con mayores emisiones de gases de efecto invernadero per cápita en Europa. Su objetivo es reducir las emisiones en un 55% con respecto a los niveles de 1990 para 2030. Las emisiones cayeron un 24,5% con respecto a los niveles de 1990 del año pasado.
Hidrógeno verde en otros países
Países Bajos no es la única nación que dedica esfuerzos por impulsar el hidrógeno renovable. Ayer escribíamos sobre Green Hydrogen for Scotland, una gran alianza empresarial cuyo objetivo es crear una red de producción de hidrógeno verde y ofrecer soluciones de mercado integrales para reducir las emisiones de los sectores difíciles de descarbonizar, como, por ejemplo, el transporte pesado, el urbano (autobuses) y los camiones de recogida de residuos.