Lhyfe, compañía especializada en producción de hidrógeno verde, y Fives, centrada en la combustión industrial, proporcionarán una oferta de descarbonización completa para la industria que abarcará desde la producción de hidrógeno hasta la combustión.
El objetivo de la iniciativa es facilitar el uso de hidrógeno en las industrias de procesos, evitando tener que modificar los equipos existentes. Para ello, Lhyfe se hará cargo de la producción y suministro de hidrógeno verde, mientras que Fives ofrecerá soluciones optimizadas y seguras para su utilización en los procesos de combustión industrial.
Uso de hidrógeno verde en la industria pesada
Además de en otras aplicaciones, la combustión de hidrógeno verde se presenta como una de las opciones más viables para lograr reducir la huella de carbono en los procesos industriales con gran consumo de energía.
Para contextualizar, un horno de aluminio secundario que actualmente produce 120 toneladas diarias haciendo uso de gas natural, reduciría sus emisiones en más de 4.000 toneladas de CO2 anuales si operara con hidrógeno verde.
En virtud de su acuerdo, ambas compañías pondrán el foco sobre las industrias metalúrgica, de vidrio y de cemento. También se usará hidrógeno verde en procesos y aplicaciones de calefacción industrial en Europa y Norteamérica.
¿Es suficiente el hidrógeno para reducir las emisiones de la industria?
El uso del hidrógeno en la industria química, petroquímica y metalúrgica, produce una gran cantidad de emisiones de dióxido de carbono. No en vano, la fabricación de acero supone el 6 y el 7% de las emisiones de CO2 globales, lo que significa entre 2 y 3 veces las emisiones de la aviación mundial.
La reducción de emisiones en la industria del acero ha llevado al desarrollo de tecnologías alternativas. La forma tradicional en alto horno de oxígeno básico (BF-BOF)– representa el 71% de la producción de acero global. Pero existe la alternativa de la ruta de reducción directa –horno de arco eléctrico (DRI-EAF)–, priorizada en las estrategias de descarbonización. En la actualidad, representa el 29% de la producción global. Gracias a este cambio, se consiguen reducir las emisiones de dióxido de carbono, pasando de 1,9 toneladas por tonelada de acero producido a 0,4 toneladas.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Un informe de Ecologistas en Acción apunta que las soluciones basadas en hidrógeno verde producen impactos en los territorios, conllevan menos mano de obra y requieren inversiones en infraestructura muy notables.
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