Acto de presentación del Valle Andaluz del Hidrógeno Verde.
Moeve ya ha puesto en marcha el Valle Andaluz del Hidrógeno Verde, un ambicioso plan que pretende revolucionar la sostenibilidad energética en España y Europa.
Este innovador proyecto tiene como principal objetivo reducir hasta seis millones de toneladas de emisiones de CO2 anuales, equiparándose a los esfuerzos combinados de todos los vehículos eléctricos proyectados en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) para 2030, según fuentes de la empresa Moeve consultadas por Europa Press.
El hidrógeno verde es un pilar esencial en la transición hacia una economía descarbonizada, especialmente en sectores como la industria y el transporte. Su método de producción no conlleva emisiones de CO2, ofreciendo así una solución perfecta para mitigar el impacto ambiental. Con cerca del 31% de las emisiones en Europa susceptibles de ser descarbonizadas mediante tecnologías de hidrógeno verde, el potencial de este recurso es innegable.
El Valle Andaluz del Hidrógeno Verde constará de dos instalaciones principales ubicadas estratégicamente en Palos de la Frontera (Huelva) y San Roque (Cádiz), con una capacidad combinada de 2 gigavatios (GW) de electrólisis. Estas instalaciones tienen la capacidad de producir hasta 300.000 toneladas de hidrógeno verde anualmente en la Comunidad Autónoma de Andalucía.
La planta en Palos de la Frontera, situada cerca del Parque Energético de La Rábida y en terrenos de Moeve, comenzará su operación en 2026, alcanzando su máxima capacidad en 2028. Por su parte, la instalación en San Roque, dentro del Parque Energético San Roque, estará operativa para 2027. Además, dentro del mismo marco, Moeve construirá en San Roque la planta de amoniaco verde más grande de Europa, con una capacidad de producción de hasta 750.000 toneladas anuales.
El desarrollo del Valle Andaluz del Hidrógeno Verde representa una inversión significativa que podría alcanzar los 3.000 millones de euros. Este megaproyecto, destinado a impulsar la autonomía energética y reducir las emisiones, promete generar un impacto económico considerable. Se estima que se crearán hasta 10.000 puestos de trabajo, de los cuales 1.000 serán directos, además de dinamizar la actividad de más de 400 pequeñas y medianas empresas (pymes) y autónomos en Andalucía.
Con el respaldo de Maarten Wetselaar, CEO de Moeve, quien ha confirmado el inicio de la construcción antes del verano, el Valle Andaluz del Hidrógeno Verde está preparado para posicionarse como el mayor proyecto de hidrógeno verde renovable en Europa. Este gran avance, además de impulsar la innovación tecnológica y la sostenibilidad ambiental, también fortalece la posición de Andalucía como líder en la transición hacia un futuro energético más limpio y sostenible.
Andalucía se posiciona como uno de los emplazamientos más idóneos a nivel mundial para liderar la producción de hidrógeno verde, gracias a sus excepcionales condiciones geográficas, climáticas e industriales. La comunidad autónoma cuenta con un potencial sobresaliente en energía renovable, destacando especialmente en la generación eólica y solar fotovoltaica, dos fuentes esenciales para la producción de hidrógeno verde. Cabe recordar que más del 80% del coste de producción de este tipo de energía limpia proviene del precio de la electricidad renovable, un ámbito en el que Andalucía posee una ventaja competitiva notable.
Además, la demanda de hidrógeno en esta comunidad autónoma es ya significativa, representando el 40% del total consumido en España. Este factor convierte a enclaves industriales como Palos de la Frontera y San Roque en lugares estratégicos para el desarrollo de proyectos de gran envergadura. Estas zonas cuentan con un ecosistema industrial consolidado que facilitará la integración de nuevas plantas de producción de hidrógeno verde, promoviendo la creación de sinergias entre diferentes sectores y garantizando una demanda estable y sostenida a largo plazo.
La instalación de estas plantas en Andalucía fortalecerá la economía local y generará empleo, además de impulsar la transición energética de la zona. Al aprovechar los excedentes de generación renovable en momentos de baja demanda eléctrica, se optimizará el uso de las infraestructuras energéticas y se reducirá la dependencia de combustibles fósiles. De esta manera, Andalucía se convertirá en un referente en sostenibilidad, contribuyendo activamente al cumplimiento de los objetivos de descarbonización de España y Europa, y afianzando su papel como epicentro de la revolución del hidrógeno verde.
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