La Universidad de Valencia ha reconocido como spin-off a la compañía química 2DMatch. Participada por la propia Universitat y por capital privado, la empresa desarrollará y comercializará catalizadores para la producción de hidrógeno verde a bajo coste, a partir de materiales abundantes y de fácil disponibilidad, en línea con los objetivos estratégicos de la Unión Europea.
La rectora de la universidad, María Vicenta Mestre, y los socios de 2DMatch, firmaron ayer el contrato de licencia de patente, así como el convenio de apoyo y reconocimiento de spin-off de la nueva empresa química, cuya sede se ubicará en el Parc Cientific de la entidad académica.
Producción de hidrógeno a bajo coste
2DMatch será una empresa especializada en desarrollo y optimización de materiales bidimensionales para aplicaciones en el campo de la energía. Más en profundidad, la compañía se centrará en la producción de hidrógeno verde mediante energías renovables con técnicas electrocatalíticas.
De este modo, la spin-off comercializará materiales para la electrocatálisis del agua y la producción de hidrógeno renovable. La gran novedad la encontramos en los materiales, basados en metales abundantes y no geoestratégicos como el níquel o el hierro, cuya alta disponibilidad reduce de forma significativa los costes de producción. Además, serán fabricados mediante un novedoso proceso químico que hace posible la producción masiva a bajo coste.
Por otra parte, 2DMatch ofrecerá además servicios de fabricación de electrodos a medida para electrolizadores y baterías, de síntesis de materiales bidimensionales con metales de transición, y de consultoría, entre otros.
La Universidad de Valencia en proyectos de hidrógeno verde
El mes pasado conocimos que un equipo internacional, participado por el Instituto de Tecnología Química (ITQ), un centro mixto del CSIC y la Universidad de Valencia (UPV), lograron producir hidrógeno con un nuevo sistema de membranas cerámicas protónicas. Para ello, desarrollaron un nuevo reactor electrificado para obtener hidrógeno de forma más sostenible y eficiente energéticamente.
El equipo combinó con éxito 36 membranas cerámicas individuales en un generador escalable y modular que produce hidrógeno a partir de electricidad y diversos combustibles, con una pérdida de energía casi nula. Este hito supuso la primera vez que se demuestra que esta tecnología permite obtener hidrógeno de forma industrial.