China se está preparando para convertirse en el líder mundial en el mercado de vehículos de pila de combustible (FCV). Pero, además, este avance supone una oportunidad para los países africanos en los que hay minería de platino, necesario para las pilas de combustible. Asimismo, China persigue no sólo la producción de vehículos de hidrógeno, sino aumentar la generación y el consumo de hidrógeno verde.


China da pasos importantes hacia la movilidad de hidrógeno. Recientemente se lanzó en el país asiático el Changan Shenlan SL03, producido por Changan Automobile, un fabricante de automóviles de propiedad estatal. Producido con la participación de Huawei y CATL, el coche eléctrico cuenta con una versión con autonomía extendida de hidrógeno.

Para China, este coche es importante, ya que, hasta ahora, los lanzamientos se circunscribían a los vehículos pesados, con mayores problemas para la electrificación. Y los datos globales apuntan a que la mitad de los vehículos de transporte pesado serán de hidrógeno al final de la próxima década.

El país asiático, además, ya cuenta con un mercado de autobuses de pila de combustible: 5.290 autobuses funcionan ya con hidrógeno en el país. Según el Programa de Colaboración de Tecnología de Celdas de Combustible Avanzada de la Agencia Internacional de Energía: la participación global de China ya alcanzó alrededor del 95% en 2020, cuando había un estimado de 5.648 autobuses H2 en todo el mundo.

Por otra parte, el World Platinum Investment Council (WPIC) publicó recientemente un pronóstico. Según el mismo, no pasará mucho tiempo antes de que la inversión de China en tecnología de vehículos de pila de combustible de hidrógeno demande la misma cantidad de platino para vehículos que para todo lo demás junto.

China y otros países demandan platino

La minería de platino en Sudáfrica ha estado cosechando las recompensas del impulso a la tecnología de combustible de hidrógeno. Después de años con precios bajos, tanto el platino, como el paladio y el rodio, han multiplicado por seis sus precios.

Con todo ello, se ha dado un fuerte impulso a la minería sudafricana. La demanda debida a la necesidad del metal para las pilas de combustible de hidrógeno ha creado un mercado completamente nuevo y en crecimiento.

Además de la mayor demanda, otro hecho impulsa el precio: el deseo de los países de avanzar en la descarbonización. E, igualmente, el que los inversores están viendo la importancia del platino como una alternativa de cobertura contra la inflación más barata que el oro.

La práctica de este tipo de minería no es la más idónea, medioambientalmente hablando. Sin embargo, estos metales son necesarios para producir pilas de combustible y avanzar en la descarbonización. Asimismo, la demanda ha hecho que muchos países estimulen su economía, con terribles efectos tras la pandemia, mediante el impulso de estas minas.

La extracción de platino es actualmente un paso crítico necesario para un metal que es capaz de soportar temperaturas más altas que otros metales. En el caso de una celda de combustible de hidrógeno, es una parte del catalizador que separa el hidrógeno y lo utiliza para generar energía eléctrica.

FUENTE: Hydrogen Fuel News.