España se encamina a encabezar la revolución del hidrógeno verde en Europa. Hace poco más de una semana, BP dio a conocer sus planes para levantar la planta de producción de hidrógeno más grande del país. Por otra parte, el interés de los inversores chinos está creciendo, y ya cuentan con varias iniciativas en marcha en el territorio español.
Queda claro que el hidrógeno verde está ganando terreno, y la Red Eléctrica de España (REE) está tomando medidas para gestionar de manera óptima el suministro de energía eléctrica que requerirá esta emergente industria sostenible.
El papel de la REE en el hidrógeno verde
La Red Eléctrica de España (REE) es responsable de gestionar el sistema eléctrico, utilizando una serie de “nudos” estratégicos para organizar y distribuir la demanda energética. Con la incorporación de las nuevas fuentes de energías sostenibles, como el hidrógeno verde, y la expansión de infraestructuras para vehículos eléctricos, la capacidad actual resulta insuficiente. Por ello, se convocan concursos que permiten a nuevos proyectos solicitar acceso y conexión a la red.
El hidrógeno verde, que depende de un suministro continuo de energía para la electrólisis, debe reservar su espacio en la red pagando un depósito de 40€ por cada kilovatio utilizado. Los nuevos proyectos, además, deberán aportar garantías adicionales si incluyen almacenamiento o integran múltiples energías renovables.
¿Puede asumir la REE todos los proyectos de hidrógeno?
Actualmente, la infraestructura energética en España no está preparada para soportar todos los proyectos de hidrógeno verde en desarrollo. Esto se debe a la creciente demanda de electricidad que requiere este tipo de energía, lo que genera una sobrecarga que la red eléctrica no puede manejar adecuadamente.
Este desafío afecta incluso a iniciativas que forman parte de los Proyectos de Interés Común (PCI), que facilita tiene acceso a financiación y reduce la complejidad burocrática. A pesar de estos beneficios, será fundamental modernizar y expandir la red eléctrica para hacer frente al aumento de la demanda energética derivada del crecimiento de esta industria.
Entre los proyectos más destacados en desarrollo hoy en día se encuentra el H2Med, con repercusiones a nivel internacional. Sin embargo, España también impulsa otras iniciativas relevantes, como HyDeal, SHYNE y los valles de hidrógeno en regiones como Cataluña, Aragón y el País Vasco. Pero, está claro que, aunque el país aspire a liderar la producción de hidrógeno verde, necesitará incrementar significativamente su capacidad eléctrica para poder lograrlo.