En la temporada 2022-23, la Fórmula E contará para la competición con la tercera generación de vehículos, los Gen3. Sin embargo, ya está planeando cómo será la cuarta generación de monoplazas. Y algo que no descartan es el uso del hidrógeno. Esto favorecería también que los fabricantes dieran un impulso importante a los coches de hidrógeno.


La Fórmula E ha presentado las primeras fotografías del Gen3, un diseño con 470 CV y una capacidad total de frenado regenerativo de 600 kW. Fue durante la pretemporada, celebrada en Valencia en el mes de noviembre.

El monoplaza debutará en la temporada 2022-23 y los equipos obtendrán las nuevas máquinas en la primera parte de la temporada. Y el Gen3 Evo, una actualización del automóvil para los próximos años, ya está en proceso.

Sin embargo, de debate un futuro a más largo plazo en el seno de la Fórmula E. Es decir, la cuarta generación de monoplazas: los Gen4. Y se ha querido involucrar a fabricantes para que compartan sus ideas sobre el desarrollo de la categoría.

Según el cofundador de FE, Alejandro Agag, en una entrevista con Motorsport.tv:

«El Gen3 ya es excepcional. Pero ahora es el momento de empezar a pensar en Gen4, que llegará en cinco años. Tenemos que empezar a hablar de inmediato. proveedores y ensambladores que están trabajando con nosotros».

Añadió que iban a discutir cómo sería la cuarta generación de monoplazas e involucrar a otros fabricantes de vehículos:

“Estamos planeando ampliar el grupo para incluir fabricantes de automóviles adicionales. Todo es posible”.

Cuarta generación de monoplazas

Entre las opciones que se barajan, se encuentra el hidrógeno. La Fórmula E examinará el uso de la tecnología de pila de combustible para alimentar motores eléctricos como parte de su estrategia. Así lo afirmó Agag:

«El hidrógeno está bajo el contrato de la Fórmula E con la FIA (supuestamente un acuerdo exclusivo de 25 años en categorías de monoplazas eléctricos).

El hidrógeno se puede utilizar de dos maneras. Una es por combustión, que es ineficiente, aunque algunas personas se esfuerzan por mejorarla.

El segundo, que es lo que utilizaríamos, es una pila de combustible de hidrógeno, que básicamente crea electricidad para alimentar un motor eléctrico».

Extreme E, la categoría hermana de la Fórmula E, ya está utilizando una celda de hidrógeno para alimentar los Odyssey 21 E-SUV de la competición.

Asimismo, HWA, un socio de Mercedes, fue una de las compañías que participó en la introducción de la Liga HYRAZE. Se trata de una categoría de vehículos deportivos impulsados por hidrógeno que debutará en 2023.

Incluso la Fórmula 1 también considera la incorporación del hidrógeno a sus monoplazas.

Sobre el presupuesto

La cuarta generación de monoplazas se contradice ligeramente con las restricciones de gasto establecidas por la Fórmula E. A partir del 1 de octubre de 2022, se debe restringir el gasto a 25 millones de euros. Sin embargo, Alejandro Agag ya ha advertido que una mayor flexibilidad técnica podrá conllevar una escalada en los gastos:

«Se requiere libertad para que los fabricantes puedan desarrollar tecnología y tener una causa para participar en el campeonato. Es crucial mantener un sentido de equilibrio. Sin embargo, cuanta más flexibilidad proporciones, más dinero gastarán los equipos y, cuando se queden sin dinero, se retirarán de la competición».

En este enlace encontrarás las novedades y el calendario de la próxima temporada, es decir, la octava.

Fuente: H2 Energy News