Imagen: Greene
La empresa Greene W2H2, filial de Greene Enterprise, continúa liderando la innovación en economía circular con su proyecto estrella, Renewton. Esta iniciativa transformadora busca convertir restos de poda y biomasa forestal en hidrógeno verde, posicionándose como un pilar esencial en la transición hacia fuentes de energía limpia y sostenible.
Con el respaldo de una subvención de 1,2 millones de euros otorgada por la Conselleria de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, Renewton se inscribe en los proyectos industriales estratégicos de la Comunidad Valenciana. Este financiamiento se destina a tecnologías que maximizan el aprovechamiento de residuos, uniendo innovación y sostenibilidad para generar energía libre de emisiones.
El proyecto cuenta con una inversión global de 3,5 millones de euros, y contempla la creación de una planta piloto capaz de procesar anualmente 1.000 toneladas de biomasa. Su producción estimada es de 1.500 MW de hidrógeno verde, un avance que marcará un punto de inflexión en la generación de energía limpia. Localizada en el Parque Industrial de Elche, la planta procesará 100 kilogramos de biomasa por hora, obteniendo 6 kilogramos de hidrógeno renovable por hora. La fase de acondicionamiento de las instalaciones ya está en marcha, con vistas a completar su operatividad en 2025, consolidando la posición de la Comunidad Valenciana en el liderazgo europeo de hidrógeno verde.
La biomasa agrícola y forestal es un recurso natural infrautilizado. En la Comunidad Valenciana, más de un millón de toneladas anuales terminan incineradas o abandonadas en vertederos, generando impactos ambientales como emisiones de gases contaminantes. El proyecto Renewton propone un modelo disruptivo: transformar estos desechos en un recurso energético de alto valor, reduciendo emisiones y mitigando el cambio climático.
El impacto ambiental de Renewton va más allá de la simple valorización de residuos. Al evitar prácticas como la quema agrícola, el proyecto disminuye significativamente la emisión de gases de efecto invernadero y contribuye a la fijación de carbono en los suelos. Este innovador enfoque posiciona a Greene W2H2 como un destacado agente en la transición energética mundial.
Uno de los sectores más beneficiados por el hidrógeno producido será el sector cerámico, muy emblemático en la Comunidad Valenciana. Este combustible renovable podría reemplazar hasta el 20% del gas natural que se utiliza actualmente, avanzando hacia la descarbonización y reduciendo su dependencia de combustibles fósiles.
El alcance de Renewton no se limita a la producción de hidrógeno. También incluye soluciones para su almacenamiento, transporte y aplicación en diversas industrias, cubriendo todo el ciclo de valor. La planta piloto estará estratégicamente cerca del corredor H2Med, un proyecto esencial para la distribución de hidrógeno verde en España y Europa.
Desde sus inicios, Greene W2H2 se ha dedicado a investigar materiales domésticos e industriales que permitan optimizar la generación de hidrógeno a costes competitivos. Con una demanda en crecimiento, la empresa está bien posicionada para convertirse en un referente dentro del sector. El proyecto Renewton es una demostración de cómo la innovación puede convertir un problema ambiental en una oportunidad sostenible. Más allá de producir hidrógeno verde, representa un cambio de paradigma en la gestión de residuos y la lucha contra el cambio climático.
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