Burgos comienza a apostar por el hidrógeno verde como uno de los pilares de futuro de su economía con dos proyectos que están actualmente en marcha. Se trata del consorcio industrial del Valle del Hidrógeno y la instalación de plantas fotovoltaicas de autoconsumo en las industrias, dotadas con electrolizadores que permitan generar hidrógeno verde. La provincia ha presupuestado 53 millones de euros para el impulso de esta tecnología. Ambos proyectos son llevados a cabo por Iberdrola y la Universidad de Burgos (UBU) y la Confederación de Asociaciones Empresariales de Burgos (FAE)
El primer proyecto recibe el nombre de Valle del Hidrógeno. Se trata de un consorcio industrial que pretende avanzar en materia de producción, almacenamiento, distribución y consumo de hidrógeno verde.
El nombre técnico del proyecto es H2RB Hidrógeno Renovable Burgos y se trata de una iniciativa recogida en una Manifestación de Interés y presentado ante el Ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) para optar a los Fondos de la Nueva Generación, 144.000 millones en préstamos y ayudas financieras de los que España dispondrá para afrontar la crisis del coronavirus. El organismo ya ha anunciado que del total de ayudas, más de 1.500 millones serán para impulsar el hidrógeno verde antes de 2023.
Bases del Valle del Hidrógeno
El Valle del Hidrógeno se sustenta, por una parte, en la gran potencia eólica instalada en la provincia, que cuenta con más de 2.000 MW repartidos en 83 parques. A través de la energía eólica es posible alimentar el proceso de electrolisis para la producción de hidrógeno verde
Del mismo modo, el territorio cuenta con una planta de almacenamiento estacionario de hidrógeno verde pionera en España.
Andrés Hernando, consejero delegado de Hiperbaric y principal estratega del consorcio que lidera la UBU, explica en el Diario de Burgos: «Aquí disponemos de puntos de consumo muy importantes de hidrógeno en la industria, lo que permitiría solventar el actual problema de demanda que existe de esta energía, porque la movilidad por hidrógeno -en el transporte pesado, principalmente- es aún muy escasa y tampoco hay hidrogeneras para el abastecimiento en ruta».
En este sentido, añade: «Burgos se ubica en un enclave geográfico estratégico para la implantación de hidrogeneras experimentales que permitan el repostaje de camiones y autobuses, los vehículos en los que más posibilidades de primera implantación y éxito tiene este gas alternativo a los combustibles fósiles.»
El Ayuntamiento de la ciudad de Burgos ha anunciado también un compromiso de uso de hidrógeno verde en su flota de autobuses interurbanos y se muestra dispuesto a la cesión de terrenos para la construcción de una hidrogenera.
Fotovoltaica e hidrógeno verde
También en territorio burgalés, el pasado miércoles se comenzó a gestar un proyecto entre Iberdrola y FAE que consiste en la instalación de plantas fotovoltaicas destinadas a autoconsumo, dotadas con electrolizadores para la producción de hidrógeno verde y su uso en entornos industriales.
Miguel Ángel Benavente, residente de FAE, señala: «Es un proyecto con futuro y subvencionado por los fondos europeos, que genera importantes ahorros energéticos, reduce emisiones de efecto invernadero y tiene claras ventajas medioambientales.»
Fuente: Diario de Burgos.