Repsol, Naturgy y Enagás, en un encuentro organizado por IESE, han hablado de hidrógeno verde. Han advertido que: no se puede incorporar a cualquier industria por su elevado coste; que las plantas pequeñas no son rentables; y que requiere de un plan de incorporación para no provocar distorsiones en el mercado eléctrico.


El hidrógeno verde está recibiendo un fuerte apoyo, tanto en cuestiones de descarbonización, como de impulso a las energías limpias en la UE. En esa línea, la jornada de IESE señaló la fuerte ofensiva actual a favor de las inversiones en hidrógeno verde por parte de las empresas. En contrapartida, también sirvió para que los ponentes expusieran sus dudas por el elevado coste actual de la producción. Asimismo, los ponentes expusieron la necesidad de una estrategia de implantación que fuera realmente útil para la industria.

Los problemas de la tecnología para Repsol

El director ejecutivo de Transformación Industrial y Economía Circular de Repsol, Juan Abascal, advirtió que el hidrógeno verde no puede hacerse atractivo basándose en ayudas. Consideró necesario trazar un plan inteligente de incorporación a la industria. Actualmente, aseguró, no se puede incorporar a cualquier empresa por su elevado coste.

Por tanto, Abascal dijo que la incorporación debe hacerse en industrias en que sea fácil escalar la tecnología con las ayudas adecuadas, Y que luego el ahorro de costes pueda llegar a otras industrias más expuestas a la competitividad exterior.

Asimismo, recordó que el 70% del coste de producir hidrógeno verde es la electricidad. EN esa línea, citó aspectos que pueden afectar a su desarrollo. Entre éstos, que los criterios sean muy estrictos y sea necesario un gran desarrollo renovable asociado a su producción.

Todo ello haría que no fuera rentable y, además, generaría distorsiones en el mercado eléctrico no fáciles de manejar. En ese contexto, argumentó que la industria necesita un flujo continuo de hidrógeno y no sólo de las horas en que funciona una fotovoltaica asociada.

Finalmente, apuntó que para el desarrollo del hidrógeno verde tiene que haber predictibilidad de la demanda.

Naturgy y el problema de la rentabilidad

El director general de Renovables, Innovación y Nuevos Negocios de Naturgy, Jorge Barredo, explicó que la generación debe ser lo más barata posible. Actualmente, afirmó, en proyectos muy pequeños, los números son menos rentables, con una diferencia abismal, respecto a los de las plantas grandes.

En consecuencia, dijo que no se debía dogmatizar, con el fin de conseguir generar un hidrógeno competitivo. Además, añadió que las ayudas para el desarrollo de hidrógeno van a ser una cosa transitoria. También explicó que esas ayudas no van a suponer más del 40% de los proyectos. El otro 60% o 70% de la inversión tendrá que ser privada, lo que requiere rentabilidad.

Enagás, producción y exportación

El director de Transformación e Hidrógeno Verde de Enagás, Antón Martínez, mostró su preocupación por un criterio muy restrictivo de casación horaria. Eso provocaría que las plantas de generación sólo pudieran funcionar por unas horas, lo que no sería beneficioso para el despliegue de la tecnología. Si la generación depende de cuando haya sol, argumentó, no va a ser fácil vender al sector industrial.

Con respecto a España como exportador de hidrógeno verde, Martínez dijo que puede serlo, pero en el medio plazo. A corto plazo, el que se produzca será para sustituir al gris y a otros combustibles fósiles.

FUENTE: Economía Digital Galicia