Hemos ido hablando durante 2023 de sectores en los que ya hemos empezado a utilizar hidrógeno de forma habitual. Industrias, empresas, transporte… la energía de este nuevo vector energético se extiende. Y la conciencia de un hidrógeno verde para su producción, también. Repasamos algunas de las aplicaciones en las que se usa la tecnología del hidrógeno, lo que permite su desarrollo y de forma importante.
El coste de producción, gracias a todo ello, continúa a la baja. Y seguirá descendiendo. Cada vez hay más sectores interesados en el hidrógeno, lo que permitirá seguir escalando y desarrollar nuevas soluciones que abaraten su precio. Igualmente, el uso de energías verdes para la generación permite confiar en que seguirá el descenso del precio.
Además, da la impresión de que hubiera un boom respecto al hidrógeno. Especialmente, se percibe en las numerosas empresas que están surgiendo por todo el mundo y que tienen como objetivo esta energía.
Por otra parte, si la mayor parte de la producción se hace con electrolizadores, gran parte de su uso se hace a través de pilas de combustible. No obstante, las investigaciones sobre el uso directo de hidrógeno líquido, a pesar de su complicada tecnología, también reciben un importante impulso.
Da la impresión de que estamos dando los pasos para una nueva revolución, en este caso energética. Y acompañada de beneficios de descarbonización para el planeta innegables.
Aplicaciones del hidrógeno
Repasamos algunas de las aplicaciones, de las que hemos ido hablando, en las que ya se emplea hidrógeno:
Aviones
Hemos ido comprobando cómo empresas grandes, y no tan grandes, experimentan con hidrógeno para aviación comercial. Citaremos sólo algunas. Entre ellas, Zero Avia, sus pruebas y acuerdos para el uso de pila de combustible en aviones.
O el de Airbus y su programa de demostración de pila de combustible HyPower.
Asimismo, vemos ya tecnología en desarrollo para hidrógeno líquido en aeronaves. Hablábamos de ello hace unos días en relación a las pruebas de Rolls-Royce e easyJet.
Incluso, a nivel de diseño, ya se contemplan nuevos aviones supersónicos para hidrógeno, como Sky OV de Oscar Viñals.
Barcos y submarinos
Curiosamente, ya hay hasta kit de conversión para barcos, con el objetivo de cambiar el diésel por hidrógeno. Hemos hablado de ello al citar el proyecto Green Boats Engineering de Unleash Future Boats.
Asimismo, citábamos, entre otros, el proyecto europeo HyEkoTank. Son ocho empresas europeas las que han lanzado el proyecto para transformar la flota marítima con hidrógeno.
Pero también hay tecnología para diferentes tipos de barcos. Entre ellos, hablábamos de Sunreef y el catamarán que utiliza el hidrógeno que produce a bordo.
No menos importante es el uso en submarinos. Navantia ya ha probado con éxito el sistema AIP BEST para submarinos S-80 e en Cartagena.
Drones
Los drones se postulan como un medio muy próximo, especialmente, para el reparto de mercancías y para entregas urgentes, como en hospitales. Hablábamos como ejemplo, recientemente, del H2D55 de Heven Drones.
Motos
También hay muchos fabricantes que realizan pruebas con hidrógeno en este ámbito. Entre ellos: H2K, el prototipo de H2 Motronics; o lo que esperamos que salga de la asociación de Yamaha y Kawasaki.
Transporte
Debemos empezar con Hyundai y Toyota. Además de la segunda generación de los Nexo y Mirai, ambas marcas fabrican camiones. En el caso de Hyundai, muchas veces hemos hablado del XCIENT FUEL CELL, distribuido por diferentes países.
Para Toyota, su pila de combustible está llegando a numerosos camiones gracias a acuerdos con otras compañías. Entre ellas, VDL Groep o Hyliko.
Pero no son ya los únicos. Fabricantes como Nikola, Iveco, Volvo, Daimler, BMW o Tevva, por citar algunos, ya comercializan o están ultimando pruebas para la comercialización.
Asimismo, nos hemos ocupado de los problemas relacionados con el transporte pesado y sus posibles soluciones. Un tema que está presente en todas las citas sobre descarbonización.
Además de camiones, ya contamos con otros medios para transporte de viajeros. Tenemos autobuses, como los de Caetano Bus, que utiliza pilas de combustible de Toyota; o los de Solaris; CAF, Irízar, o el recién presentado de IVECO y Hyundai, también por citar algunos.
Finalmente, no olvidamos el uso en máquinas de transporte ferroviario en líneas donde no hay electrificación, como el tren de FNM y Alstom que ya se utiliza en Lombardía (Italia).
Producción de combustibles, fertilizantes, etc.
No menos importante para la descarbonización es el uso de hidrógeno para producir eFuels, fertilizantes, etc. Hemos tenido oportunidad de saber de todo ello durante este 2023.
Sin ir más lejos, durante la COP28, Cepsa y C2X anunciaron la mayor planta de metanol verde de Europa en Huelva.
Además, recordemos que la planta de producción de hidrógeno de Puertollano, de Iberdrola, ya tiene casi año y medio de funcionamiento y abastece a la de producción de fertilizantes de Fertiberia.
Logística con hidrógeno
Igualmente, van surgiendo cada vez más vehículos de uso para almacenes de logística. Entre ellos, carretillas elevadoras y trasportadores de mercancía. Y, por supuestos, comerciales ligeros para la distribución. Entre ellos, Toyota, Hyundai, Hyvia o Stellantis.
Energía de respaldo y móvil
Las pilas de combustible de hidrógeno estacionarias están demostrando ser opciones válidas de generación de energía de respaldo o de emergencia. Pueden remplazar a los generadores diésel donde el suministro de energía es vital, como centros de datos u hospitales.
Además, en zonas remotas también se puede utilizar el hidrógeno. Concretamente, en lugares donde no hay posibilidad de engancharse a la red eléctrica.
De este ámbito también hemos hablado en infinidad de ocasiones. Como ejemplos, el generador de Hitachi HyFlex. O las pruebas de Roll-Royce PLC con hidrógeno en motores de combustión.
Producción dehidrógeno
Hablábamos del Global Hydrogen Review 2023 de la AIE con motivo del Día Internacional contra el Cambio Climático, en octubre de 2023. Decíamos que la producción anual de hidrógeno de bajas emisiones podría alcanzar los 38 Mt en 2030, si se realizan todos los proyectos anunciados. Dichos proyectos suponen un 50% de producción potencial para 2030 que la del informe de la AIE de 2022. De los 38 MT, 27 se basan en electrólisis y electricidad de bajas emisiones. Pero los otros 10 proceden de combustibles fósiles con captura, utilización y almacenamiento de carbono.
Aunque apenas este reportaje es un esbozo de lo que supone el avance del hidrógeno, no podemos dejar de comentar la cantidad de empresas que se dedican ya a producirlo mediante electrolizadores. Y no sólo con agua dulce, sino también con agua salada, como es el caso de Schaeffler y su proyecto SEA2H2.
Recientemente, hablábamos de la china SANY, que ha anunciado el lanzamiento del mayor electrolizador del mundo, a escala de GW; del proyecto PosHYdon o del BOxHY, en plataformas de mares del norte; la producción de Lhyfe en Francia. Asimismo, la producción de Iberdrola en Puertollano, la de Petronor en Muskiz; o el poyecto SEAWORTHY en la plataforma de Canarias.
Todo ello, contribuye a avanzar hacia un mundo energéticamente descarbonizado, a luchar contra el cambio climático y a hacernos independientes, energéticamente hablando, de situaciones como las vividas con la invasión rusa de Ucrania.
Además, a medida que los costes de producción de hidrógeno vayan bajando, se irá utilizando en muchas más aplicaciones. Buena prueba de ello son las numerosas investigaciones que se distribuyen por el mundo.
